Gabriel Tamariz, titular de la Unidad de Política Laboral y Relaciones Institucionales de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) reconoce que el capítulo laboral que se incluyó en el T-MEC cuenta con una herramienta que ha sido eficaz, “por su capacidad sancionadora” como es el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida (MRLRR), en donde México ha sido sido señalado en 29 ocasiones, y si bien éste se mantendrá, México debe encaminarse a contar con una herramienta similar.
En entrevista con El Economista Gabriel Tamariz comenta que “lo efectivo del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida es su capacidad para sancionar a una empresa. Si no tuviera esa capacidad nadie le haría caso”.
Añade que es fundamental que se dote al Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral (CFCRL) de esa capacidad misma sancionadora.
Tras reconocer que aún cuando se llevará a cabo la revisión del tratado comercial con Estados Unidos y Canadá, el MLRR llegó para quedarse“no podemos deshacernos de ese mecanismo por lo pronto porque ya es un compromiso adquirido, se firmó y es parte del T-MEC».
Tamariz pronosticó que en todo 2024 “el estimado que hicimos, de acuerdo a la tendencia a principio de año, serán alrededor de 20 quejas laborales que tendremos que atender”.
Por ello, detalló que es fundamental “hacer avanzar la reforma que se encuentra en el Senado de la República para darle la facultad al Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral de sancionar cuando haya una violación de parte de la empresa o de parte de un sindicato a los derechos de libertad de asociación y negociación colectiva.
“Eso es lo fundamental, para que en nuestro país, y de acuerdo a nuestras instituciones y leyes, tengamos nosotros esos dientes que no tenemos, y entonces, sí sería conveniente un mecanismo interno y ya, definitivamente, una vez que eso suceda podríamos prescindir del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida del T-MEC” comentó.
Cabe recordar que el MLRR es una herramienta -única en su tipo- que se diseñó en el marco del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC); su principal objetivo es atender los casos en los que las empresa limitan la libertad sindical y la negociación colectiva de las y los trabajadores.
Hasta la fecha hay 29 casos atendidos; de los cuales 23 están cerrados, 5 casos están activos y hay un panel laboral que está activo -en proceso de revisión con los panelistas- y en todos ellos, indica el funcionario que encabeza las negociaciones, “no necesariamente esos esfuerzos son una obligación del gobierno de México. Nosotros lo hemos hecho por voluntad propia. Por ejemplo, las capacitaciones, no es que tengamos el compromiso a través del tratado de dar esas capacitaciones. Entre otros logros que hemos tenido en las empresas donde está el mecanismo”.
También plantea que, a tres años años de la entrada en vigencia del T-MEC, “es cuestión de analizar, a trasluz del tiemposi esos datos son pequeños o si son razonablemente presumibles. Y luego, otro tema también interesante es saber si realmente ha sido esto un elemento, un instrumento para incentivar a la industria automotriz en Estados Unidos y desincentivarla nuestra. Eso es para hacer un análisis y una investigación seria”.
Además, hizo un llamado a los empresarios para que notifiquen a la autoridad laboral sobre esos posibles casos de denegación de derechos laborales, “ya somos cinco actores involucrados en temas laborales, en este caso colectivos, que nos sentamos en la mesa. A veces tenemos varias mesas a lo largo de semanas y hemos logrado acuerdos muy importantes”.