Medios locales de Miami alertan del aumento de estafas por llamadas telefónicas, como le sucedió recientemente a una madre de dos hijos, que perdió casi 3 mil dólares en unos minutos. Detalles a continuación. Según un reporte del canal televisivo Telemundo 51, Gisselle, una madre de dos niños, perdió todos sus ahorros después de ser víctima de una estafa a través de Zelle, una plataforma de transferencias electrónicas.El incidente ocurrió el pasado 27 de julio cuando recibió una llamada telefónica supuestamente de su banco, alertándola sobre transacciones sospechosas en su cuenta.“Mi vida cambió totalmente a partir del 27 de julio, a las 12:25 de la tarde”, dijo.Según su relato, los estafadores, haciéndose pasar por representantes de su banco, le informaron sobre actividades inusuales en su cuenta.Desconcertada, Gisselle puso la llamada en altavoz y accedió a su banca en línea para verificar la situación. Fue entonces cuando presenció cómo los delincuentes tomaban el control de su cuenta bancaria.“Entré en pánico”, relató la víctima, al ver cómo su dinero desaparecía rápidamente. Estafas en Miami: llamada y Zelle Aunque no estaba utilizando Zelle en ese momento, los estafadores lograron vaciar su cuenta, robándole 2.398 dólares, que eran sus ahorros para cubrir gastos personales.Fue en ese instante que comprendió que la llamada no provenía de su banco, sino de criminales que habían suplantado su identidad.Las transacciones fraudulentas se realizaron a un número telefónico que Gisselle había registrado en su cuenta unos días antes, tras conocer a una persona en su lugar de trabajo. Había utilizado Zelle para pagarle a esta persona por tres prendas que le había comprado.A pesar de presentar un reclamo ante la policía y en su banco, Wells Fargo no le había reembolsado el dinero perdido, dejando a Gisselle sin sus ahorros y en una situación financiera crítica. No obstante, poco después la banca actuó a su favor, pero no todos corren la misma suerte.“Cuando mi dinero regresó volví a ser yo. Mi familia y yo fuimos afectados por esto, y gracias a Dios, mi familia y yo pudimos poner nuestras cuentas al día”, sentenció.
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