¿Cuántos remedios conoces para calmar las picaduras de los mosquitos? Seguro que te vienen a la cabeza unos cuantos, también medicamentos de la farmacia que prometen calmar el picor. Yo hace poco aposté por uno tecnológico: un accesorio para el móvil qué aplica calor intenso a las picaduras. Decidí enfrentarlo con los remedios de la abuela.
A todos nos tocan en suerte cualidades y aptitudes que a lo largo de la vida evolucionamos hasta hacerlas parte del trabajo, de la personalidad y del ocio. Yo he tenido suerte con algunas, no tanta en otras. Por ejemplo, soy ése del grupo al que siempre le pican los mosquitos. ¿Que hay uno revoloteando por la habitación? Todos sabemos a quién le va a clavar el aguijón la probóscide. Y si salgo a la calle en verano seguro que vuelvo a casa como un Ferrero Rocher. Por eso siempre tengo algún remedio para calmar el picor de las picaduras.
«Oye, ChatGPT. ¿Cuáles son los mejores remedios caseros para calmar las picaduras de mosquito?»
Ningún mosquito fue dañado para la elaboración de este artículo. El redactor no tuvo tanta suerte
La mayor parte de las soluciones de la abuela ya me las conocía, no en vano fui poniéndolas en práctica a lo largo de la vida. Pero me decidí a consultarlo también con la IA, por si acaso había alguno que se me escapaba. ChatGPT me dio bastantes más remedios de los que imaginaba.
Aparte de aguantarme con el picor o restregarme el cuerpo con papel de lija, éstos son los remedios caseros que me decidí a probar:
- Saliva. ¿Quién no se ha calmado una picadura humedeciéndola con saliva?
- Frío. El hielo debería funcionar, al menos insensibiliza.
- Cáscara de plátano. Se ve que el plátano no sólo sirve para comer o para hacer bromas con la cáscara.
- Amoníaco diluido. Tengo un amigo que lo hacía, nunca me arriesgué. Aunque es el componente principal del After-Bite, siempre tengo un frasco en el botiquín.
- Bicarbonato. Hace poco hice un truco de MacGyver mezclando Loctite y bicarbonato para arreglar un recipiente, tengo de ambos (¿servirá el Loctite para las picaduras? Mejor no probarlo).
- Pis. Yo no censuro los remedios caseros, éste es uno de los habituales (que se lo pregunten a Chandler).
- Aloe vera. Tengo una planta de aloe asilvestrada en el jardín, no hay problema.
- Calor. Éste es el remedio al que enfrentaré todos los caseros: calor aplicado con el accesorio para el móvil Heat It.
Una vez puestos sobre la mesa todos los remedios para calmar las picaduras de mosquito, tanto los que yo conocía como los que me dio ChatGPT, llegó el momento más doloroso: poner mi cuerpo al servicio de la cencia. No me cuesta mucho recibir picaduras que sirvan como objeto de estudio, sólo tengo que salir por la puerta de mi casa. Incluso en el momento en que escribo estas líneas: son las doce del mediodía y fuera hace más sol que en un folleto turístico de España.
Me siento identificado con esta escena de Lilo y Stitch
Tras recibir mi dosis de picaduras, fui probando todos los remedios caseros y el tecnológico.
Saliva
No es un remedio que haga mucho, la verdad, sólo calma momentáneamente por la sensación de frescor que produce la evaporación de la saliva. Mejor usarla para un helado que para calmar el picor de un mosquito.
Frío
Abro el congelador, saco un hielo y me lo aplico sobre la picadura. Las molestias se calman al momento y, encima, me refresco: el remedio es efectivo durante los primeros segundos. Una vez pasa el minuto el picor vuelve con ganas, no sirve a largo plazo.
Cáscara de plátano
La sensación de frescor fue inmediata: igual que con el hielo o con el aloe vera, el alivio de la humedad evaporándose de la piel calma el picor de la picadura. En un principio el grano picaba algo menos, pero a los pocos minutos se recuperó. Sí fue más sufrible, algo hace.
Amoníaco diluido
Pese a ser un remedio casero realmente antiguo, no es algo que yo recomendaría a nadie: el amoníaco puede hacer daño en la piel si la disolución no es la adecuada. Para evitar problemas, medicamentos como After-Bite, con amoníaco de uso tópico y en la concentración adecuada, son la mejor opción.
¿Funciona el amoníaco diluido? Lo cierto es que sí: tras aplicar el líquido el picor se relaja, aunque no llega a desaparecer. Con los mosquitos tigre no termina de calmar por completo, a los pocos minutos el picor vuelve, algo menos agresivo. No rebajó el hinchazón de la picadura.
Bicarbonato
Walter White estaría orgulloso
Hice la pasta con el bicarbonato y agua para después aplicármela sobre una de las picaduras que estaba rabiando. El resultado fue decepcionante: más allá del frescor por la humedad, no aprecié alivios notorios en el picor o en la hinchazón, ni a medio ni largo plazo.
Pis
Echando mano de la ciencia, la orina contiene amoníaco en una disolución muy pequeña, por lo que es una extensión del remedio de la abuela anterior. En mi caso (Iván, por la cencia), no hizo demasiado: la apliqué sobre la picadura con ayuda de una gasa sin apreciar un resultado notorio. Si el cuerpo la expulsa es por algo, next.
Aloe vera
Aprovechando que crece en el «jardín», y que la zona está conquistada por los mosquitos tigre, arranqué una hoja de la planta mientras ofrecía mi cuerpo como sacrificio. El resultado fue satisfactorio, sobre todo en lo respectivo a recibir picaduras. El chiste del Ferrero rocher se quedó corto.
Tras aplicar el aloe vera, presionando un poco la planta para que saliera el jugosentí un leve escozor que calmó ligeramente las molestias de la picadura. El alivio no fue completo, pero sí que es verdad que hizo bastante. Tras repetir varias veces el proceso la hinchazón terminó bajando.
Calor
Turno de enfrentar los remedios caseros de la abuela a la tecnología: para aplicar calor en las picaduras utilicé el accesorio Heat It, una resistencia controlada por una app que, conectada al USB C del móvil, aplica calor controlado en intensidad y en tiempo.
Suelo poner la aplicación al máximo de tiempo y de intensidad. Dependiendo de la sensibilidad de la zona a veces cuesta de aguantar la sensación de quemadura, porque el calor del Heat It insensibiliza en un primer momento y calma a medio plazo. Bajo mis pruebas y las de mi familia, es de los métodos más baratos y efectivos: si tengo alguna picadura puntual es lo que utilizo. Cuando me han picado varios la cosa cambia: cuesta mucho aliviar todas las picaduras, aunque sólo sea por el tiempo que necesita la aplicación para aplicar el remedio.
Conclusiones
Tras la comprobación empírica de todos los métodos descritos, y después de haberme dejado picar por una jauría de mosquitos tigre para después embadurnarme con distintos productos (sí, también con mi propia orina), tengo mis conclusiones.
- Lo mejor es combinar el frío con un método efectivo secundario. La sensación de frescor en la piel es el alivio instantáneo por excelencia: cuando una picadura rabia el hielo funciona genial. Después, he comprobado que aplicar un remedio secundario para el medio y largo plazo es una buena estrategia: el amoníaco diluido resulta efectivo, el aloe vera me parece más natural y respetuoso con la piel. Ambos me han ido bastante bien.
- Para una picadura puntual el calor localizado funciona muy bien. Ese grano que se hincha, que da ganas de pasarte el rastrillo por el brazo… Tras aplicar el Heat It no sólo se va el picor, también se mantiene el alivio casi hasta desaparecer. Depende de la picadura, de la zona de la piel y del insecto, a mí me ha resultado muy efectivo.
- En el caso de varias picaduras con un picor inaguantable, frío y calor. A menudo me despierto después de que un mosquito haya decidido salir de fiesta por mi cuerpo. En esas ocasiones, lo que mejor resultado me dio fue ponerme hielo en las picaduras para calmar lo más rápido posible el picor e ir aplicando el Heat It una vez el frío desaparecía de la zona. El contraste me ha ido muy bien.
Todas las pruebas y mediciones las hice sobre mi propia piel: estos remedios pueden provocar reacciones adversas en otras personas. Hay que tener mucho cuidado antes de aplicar los remedios
Los medios que me dieron mejores resultados fueron el hielo, el aloe vera, el amoníaco diluido y el calor aplicado con el Heat It. La saliva, el pis y el bicarbonato los desecharía por completo de mi lista de remedios de la abuela. Y la cáscara de plátano está a medio camino: el frescor inmediato me fue bien, también calmó ligeramente el picor. Que ya fue mucho.
Imagen de portada | Iván Linares
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