El impacto de la conectividad constante en la salud mental y el trabajo
Vivimos en una era de avances tecnológicos sin precedentes, donde la conectividad es omnipresente. La tecnología ha brindado innumerables facilidades y oportunidades, pero también ha traído consigo importantes desafíos para la salud mental y la calidad de vida. El uso cada vez mayor de pantallas y la presión de estar constantemente conectados han contribuido al surgimiento de una nueva forma de burnout: el burnout digital.
La terapeuta, gestora de carrera y directora ejecutiva, Madalena Feliciano, comenta que la tecnología, por un lado, prometía simplificar nuestras vidas y aumentar nuestra productividad. Sin embargo, paradójicamente, muchos de nosotros nos encontramos trabajando más horas y enfrentando una sobrecarga de información constante. La línea entre el trabajo y la vida personal se ha vuelto cada vez más borrosa, con correos electrónicos, mensajes y notificaciones invadiendo nuestra privacidad y tiempo de inactividad.
El resultado de este estilo de vida súper conectado es el agotamiento crónico, tanto físico como mental. La presión de responder instantáneamente a los mensajes y la expectativa de estar siempre disponible para trabajar ha provocado altos niveles de estrés, ansiedad y agotamiento. La falta de límites claros y la dificultad para desconectar de las pantallas contribuyen a la sensación de que nunca podremos escapar de las exigencias de la vida digital.
¿Cuándo es importante desconectar?
Desconectar se ha convertido en una necesidad urgente para preservar la salud mental y el equilibrio en nuestras vidas. Desconectar no significa abandonar por completo la tecnología, sino establecer límites saludables y adoptar prácticas que promuevan un uso consciente y equilibrado de las pantallas.
Una de las estrategias más efectivas es introducir actividades sin pantallas en tu rutina diaria. Estas actividades, como manualidades, práctica de instrumentos musicales o juegos de cartas y de mesa, requieren una atención centrada y proporcionan un descanso del ritmo acelerado de la vida digital. Al participar en estas actividades, podemos calmar la mente, estimular la creatividad y experimentar una sensación de plenitud que no está ligada al mundo digital.
“Además, es fundamental establecer límites claros entre el trabajo y la vida personal. Fijar horarios concretos de trabajo y respetar estos límites es fundamental para evitar el agotamiento. Desconectarse del trabajo fuera del horario establecido, evitar el uso de dispositivos electrónicos durante las comidas y durante las actividades diarias, como lavar los platos, son prácticas que promueven la atención plena y la conexión con el momento presente”. Destaca Madalena Feliciano.
Hacer ejercicio y pasar tiempo al aire libre también juega un papel crucial en la prevención del agotamiento físico y mental. El ejercicio físico no sólo ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, sino que también mejora el estado de ánimo y aumenta la sensación de bienestar. Estar en contacto con la naturaleza y recibir luz solar aporta beneficios adicionales, como una mayor claridad mental y relajación.
Además, es importante reconocer que la desconexión no es sólo una elección individual, sino también una responsabilidad de las organizaciones y de la sociedad en su conjunto. Los empleadores pueden implementar políticas que fomenten el equilibrio entre la vida personal y laboral promoviendo descansos regulares, limitando el envío de correos electrónicos fuera del horario laboral y fomentando la desconexión durante las vacaciones. La sociedad también puede promover una cultura que valore el descanso y el bienestar, reconociendo que la productividad no se puede medir únicamente por el tiempo pasado frente a las pantallas.
Encontrar el equilibrio entre tecnología y desconexión es un desafío al que nos enfrentamos a diario. La clave es adoptar prácticas que nos permitan disfrutar de los beneficios de la tecnología, mientras protegemos nuestra salud mental y calidad de vida. “Desconectar no significa abandonar la tecnología, sino utilizarla de forma consciente y equilibrada, estableciendo límites saludables. Practicar actividades sin pantallas, establecer límites claros, practicar ejercicio físico y pasar tiempo al aire libre podemos evitar el agotamiento mental provocado por el trabajo y el exceso de conectividad”, enfatiza Madalena Feliciano.
La búsqueda del equilibrio entre tecnología y desconexión es un desafío actual que requiere atención y esfuerzo continuo. Al implementar estas estrategias en nuestra vida diaria, podemos encontrar un camino hacia una relación más saludable con la tecnología, donde podamos disfrutar de sus beneficios sin comprometer nuestra salud mental.
Es hora de repensar nuestra relación con el mundo digital. La desconexión no es un lujo, sino una necesidad para preservar nuestra salud, bienestar y calidad de vida. Al adoptar prácticas que nos permitan encontrar un equilibrio saludable, podemos afrontar los desafíos de la era digital con mayor resiliencia y encontrar un camino hacia una vida más equilibrada y satisfactoria.
“Por eso, invitamos a todos a reflexionar sobre sus propias prácticas digitales, establecer límites saludables y explorar actividades sin pantallas que puedan aportar equilibrio y bienestar. Juntos, podemos construir un futuro en el que la tecnología sea un aliado, no una fuente de agotamiento, y donde podamos disfrutar de una vida plena y saludable, tanto en línea como fuera de línea”. Termina Madalena Feliciano.
Más información sobre Madalena Feliciano:
Empresaria, CEO de tres empresas, Outliers Careers, IPCoaching y MF Terapias, consultora ejecutiva de carrera y terapeuta, se ha desempeñado como coach de líderes y equipos y con orientación profesional durante más de 20 años, especializándose en gestión de carrera y desarrollo humano. Estudió Terapias Alternativas y MBA en Hipnoterapia. Ha concedido entrevistas para varios programas de televisión cubriendo los temas de carrera, empleabilidad, coaching, perfil de comportamiento, actitud profesional, hipnoterapia y otros temas relacionados con el mundo empresarial. Master Coach, Máster en PNL e Hipnoterapeuta, Madalena brinda servicios personalizados para: Fobias, depresión, ansiedad, miedos, tartamudez, pánico, anorexia, entre muchos otros.
