Salud
Las flatulencias o gases intestinales son una consecuencia normal de todo el proceso digestivo. De media se calcula que cada persona acumula de medio litro de gas a litro y medio. Y se tira unos veinte pedos al día.
Esto sucede porque, al comer y beber, tragamos pequeñas cantidades de aire, especialmente si comemos o bebemos rápidamente, hablamos mientras comemos o utilizamos pajitas. Este aire se desplaza hacia el sistema digestivo y puede acumularse en el estómago y el intestino. Sin embargo, la mayor parte de los gases intestinales se producen en el intestino grueso durante el proceso de digestión.
En muchas culturas, por educación y vergüenza, se aguantan y se evita expulsarlos. También pueden provocar risas, sobre todo entre niños.
Sin embargo, no todos los gases son iguales y hay que prestarles atención ya que un olor desagradable puede estar relacionado tanto con la dieta como con la salud gastrointestinal de una persona.
Por qué se producen los gases intestinales
“Al abrir la boca y comer puede entrar aire en el estómago. Las bebidas gaseosas también tienen aire. Y los alimentos en combinación con las bacterias del intestino pueden generar gases”, nos enumera el doctor el Doctor Luis Bujanda, responsable del Área de Enfermedades Digestivas del Instituto Biodonostia y expresidente de la Asociación Española de Gastroenterología.
Todo este aire no puede quedar en el tracto digestivo. Por eso, hay que expulsarlo. Si está en el estómago, a través de los eructos. Si la bolsa de aire se forma en los intestinos, se elimina mediante flatulencias.
No es bueno aguantarse los pedos. No pasa nada si en un acto social, nos cohibimos. Lo que no puedes es evitarlos a toda costa. Han de salir o pueden causarnos, hinchazón y dolor abdominalel flato.
Qué indica el olor de las flatulencias
Hay varias clases de pedos. Tiene relación con lo que hayamos comido y el estado de tu intestino. “Como cada persona tiene su propia microbiota intestinalva a variar de una persona a otra”, explica el doctor Bujanda.
Esos gases acumulados son básicamente hidrógeno, metano y dióxido de carbono. Según su composición, pueden oler de una forma u otra. “Pero el olor no va a determinar una patología. Hay algún estudio que lo ha analizado, pero no se tiene en cuenta en la práctica clínica”, nos aclara el especialista.
El olor va a depender de la composición y el estado del intestino. Por ejemplo:
- Sin olor. Los más agradecidos. Los causa un exceso de hidrógeno, por ejemplo por bebidas carbonatadas.
- Olor a huevo podrido. Significa una producción alta de azufre. Hay alimentos que lo provocan, como el brócoli, las carnes, la cerveza.
- Olor a heces. Seguramente es debido a que hay heces acumuladas en el intestino grueso esperando a salir.
El hecho de que los pedos sean ruidoso o silencioso no depende del gas, sino tu esfínter. Según la posición que tengamos los pedos harán más o menos ruido.
Cómo tratar el exceso de gases
“Solo por tener más gases no significa que estés enfermo”, insiste el especialista. Aunque si tenemos hinchazón y expulsamos flatulencias muy frecuentemente, puede ser señal de un trastorno digestivo.
El gastroenterólogo nos apunta algunos cambios en la dieta y tus hábitos que pueden ayudar a reducir los gases:
- Deja los refrescos con gas y toma más agua.
- Reducir alimentos con hidratos de carbono complejos (espinacas, maíz en grano, plátanos)
- Come con más calma y mastica biensin engullir. Haz porciones más pequeñas.
- No tomes chicles que suelen hacer tragar más aire.
Qué problemas pueden causar un exceso de gases
Si tras tomar estas medidas no se reduce la producción de gases, has de consultar puesto que entonces sí puede ser debido a un trastorno digestivo.
Una intolerancia a algún alimento o una dentadura postiza pueden también provocar gases
- “El síndrome del colon irritable o una patología de mala absorción e intolerancia alimentaria (la celiaquía, por ejemplo) pueden provocan hinchazón y molestias”, dice el doctor Bujanda.
Otras causas son:
- Una dentadura postiza mal ajustadaque hace que no mastiques bien y tragues más aire.
- Consumo de edulcorantes en personas que son intolerantes.