Estados Unidos, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea y 10 países de Latinoamérica rechazaron este viernes enfáticamente la sentencia que convalidó la reelección del presidente Nicolás Maduro en Venezuela.
También España y México, gobiernos que hasta ahora se mostraban ambiguos, anunciaron que no reconocerán el supuesto triunfo de Maduro hasta que se comprueben los resultados con las cifras concretas de la elección, que hasta ahora no se hicieron públicas.
En tanto, Brasil y Colombia están dialogando para elaborar un comunicado conjunto en demanda de las actas y rechazo por inconstitucional del fallo de la Corte suprema venezolana, según afirmaron fuentes de Brasilia a Clarín.
En tanto, el régimen chavista reaccionó llamando al ex candidato presidencial de la oposiciónEdmundo González Urrutia, a declarar ante la Fiscalía General del país por su responsabilidad en la publicación, en una web, de supuestas actas que lo dan vencedor por más del 60% de los votos.
Argentina, Costa Rica, Chile, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay, rechazaron «categóricamente», en un comunicado conjunto con Estados Unidos, el fallo que aseguran «pretende convalidar los resultados sin sustento emitidos por el órgano electoral». Y pidieron una auditoría independiente de las actas de votación.
El comunicado conjunto no lleva la firma de Brasil, Colombia ni México, las tres potencias regionales que habían asumido el rol de mediadores entre Maduro y la oposición.
Por el momento, solo el mexicano Andrés Manuel López Obrador opinó abiertamente sobre el fallo del TSJ. Este viernes, en su rueda de prensa matutina, dijo que estaba dispuesto a esperar la publicación de las actas antes de tomar partido. “Vamos a esperar que den a conocer las actas porque ayer el Tribunal Electoral de Venezuela sostiene que ganó la elección el presidente Maduro y, al mismo tiempo, recomienda que se den a conocer las actas, creo que hay una fecha de la resolución, entonces vamos a esperar”, remarcó.
Washington consideró además que «es el momento» de que el chavismo gobernante y a la oposición «inicien conversaciones sobre una transición» política, según el Departamento de Estado.
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), cuya independencia cuestionó una misión de la ONU para evaluar los derechos humanos en Venezuela, emitió el jueves una sentencia que certificó los resultados de las presidenciales del 28 de julio.
Apuesta inicial denuncias de fraude de la oposición, Maduro había pedido al TSJ -cuyos miembros fueron elegidos por el Parlamento oficialista y responden al régimen- validar los boletines anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que lo proclamó vencedor con 52% de los votos para un tercer período de seis años (2025-2031).
La oposición asegura que su candidato, Edmundo González Urrutia, ganó los comicios por más del 60% de los votos y acusa al TSJ y al CNE de servir al chavismo.
Presión mundial
Estados Unidos, que mantiene sanciones contra Venezuela y su industria petrolera y lidera la presión internacional contra Maduro, sostiene que existe «abrumadora evidencia» del triunfo de González Urrutia.
El fallo de la corte suprema «carece totalmente de credibilidad, dada la abrumadora evidencia de que González recibió la mayoría de los votos», dijo Vedant Patel, portavoz del Departamento de Estado, en un comunicado.
«Los continuos intentos de reclamar fraudulentamente la victoria de Maduro sólo exacerbarán la crisis», añade el texto, que llama a emprender negociaciones para una transición «respetuosa y pacífica».
La Organización de Estados Americanos (OEA) ya había exigido en una resolución la semana pasada que el régimen de Maduro publique las actas de la elección y respete los derechos humanos, mientras organizaciones no gubernamentales denuncian la muerte de 25 personas y el arresto de más de casi 2.500 en el marco de las masivas marchas opositoras que fueron reprimidas por el régimen.
Este viernes, la OEA reiteró el pedido en un comunicado: “Esta Secretaría General reitera que el CNE proclamó a Maduro de manera apresurada, con base en un boletín parcial emitido de forma oral, con números que evidenciaban imposibilidades matemáticas y sin presentar los resultados desagregados que, conforme con la ley, debe tabular mesa por mesa”. Y llama al Tribunal Penal Internacional a que intervenga ante las detenciones, torturas y perseguidos políticos en Venezuela.
Liderada por la ex diputada María Corina Machado, la oposición publicó en una web copias de actas de escrutinio que, sostiene, comprueban la victoria de su aspirante con 67% de los sufragios. El chavismo desestima la validez de estos documentos, asegurando que son «forjados».
El CNE no ha publicado resultados mesa por mesacomo exige la ley, al alegar que su sistema fue blanco de un jaqueo.
«íSanta palabra!», reaccionó Maduro en un acto en la ciudad costera de La Guaira tras la publicación del fallo del Tribunal, que en realidad no sorprendió pues hace días se esperaba que convalidara la supuesta victoria del mandatario.
El canciller venezolano, Yvan Gil, pidió el jueves «respeto y no injerencia» a la comunidad internacional.
El documento firmado este viernes por diez países de América Latina y Estados Unidos remarca que «solo una auditoría imparcial e independiente de los votosque evalúe todas las actas, permitirá garantizar el respeto a la voluntad popular».
Reacciones
La opositora Machado saludó el comunicado. «A estas alturas, nadie se traga la burda maniobra del TSJ para esconder las actas que demuestran la apabullante victoria» de González Urrutia, escribió en la red X.
El mundo democrático se cuadra con el pueblo de Venezuela y el respeto a nuestra Soberanía Popular.
A estas alturas, nadie se traga la burda maniobra del TSJ para esconder las actas que demuestran la apabullante victoria de @EdmundoGU.
Por eso, una vez más, el régimen se… imagen.twitter.com/OsB7x5NRCo
— María Corina Machado (@MariaCorinaYA) 23 de agosto de 2024
«El régimen se equivocó: lo que el TSJ sentenció fue su complicidad con el fraude del CNE. Lejos de ‘cerrar el caso’, han acelerado el proceso que cada día aísla y hunde más a Maduro», añadió.
En contraste, los gobernantes de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y Nicaragua, Daniel Ortega, felicitaron a Maduro.
Desde Europa, también exigen las actas de la elección. «Hay que probar este resultado electoral y de momento no hemos visto ninguna prueba», dijo este viernes el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell.
«Mientras no veamos un resultado que sea verificable, no lo vamos a reconocer», declaró a la prensa Borrell en Santander, España, donde dijo estar intentando que los 27 países de la UE «fijen una posición» como bloque.
Por lo pronto, el gobierno español pidió que «se publiquen de manera íntegra y verificable» las actas.
El TSJ -que no presentó detalles técnicos del peritaje y dijo que el fallo es «inapelable»- dijo en su sentencia que el material electoral peritado queda bajo su «resguardo» y exhortó al CNE a publicar en gaceta oficial los «resultados definitivos», sin pedir detalle mesa por mesa.
Fuente: Agencias
C.B.