Los amantes del fútbol están de enhorabuena. El Mundial de 2030 se celebrará en España, Portugal y Marruecos. En nuestro país hay 15 ciudades candidatas a albergar algún partido de este gran evento deportivo, pero el número se reducirá… y es aquí donde la tecnología entra en juego. Aquellas ciudades que quieran ser sede del Mundial de Fútbol 2030 tendrán que hacer un gran esfuerzo tecnológico. ¿Qué se les pedirá a esos estadios?
1. Sostenibilidad
No es de recibo que un estadio de fútbol consuma 8 millones de kW/hora al año. Para impedirlo algunos clubs (como es el caso del Athletic de Bilbao) ya han tomado medidas que los ha llevado a conseguir la certificación de edificio sostenible. Otros equipos, como el Borussia Dortmund y el Atlético de Madrid, aprovechan la energía solar. Incluso hay clubes que emplean materiales reciclables o que son capaces de reusar el agua de lluvia para regar el césped o emplearla en las duchas del estadio.
2. Retractilidad
Hay ocasiones en que las inclemencias meteorológicas impiden que el fútbol se desarrolle con normalidad. Para solucionarlo los campos de fútbol modernos disponen de techos retráctiles que cierran el recinto cuando llueve mucho o hace mucho viento. Ejemplos son el nuevo Santiago Bernabéu, el Johan Cruyff Arena o Wembley.
3. Conectividad
Los campos que deseen ser sede de un Mundial de fútbol necesitan una conexión fluida que permita la conexión simultánea de un millón de dispositivos por kilómetro cuadrado. Un ejemplo es la implementación de una nueva red en el Camp Nou que permite dar cobertura 5 G a todo el estadio. Gracias a ello los espectadores pueden hacer retransmisiones en directo de los partidos convirtiéndose en emisores o creadores de contenidos. Esta conexión también permite, gracias a las cámaras de 360 grados y a las gafas adaptadas, que los espectadores se sitúen virtualmente en situaciones similares a las que afrontan los jugadores (lanzamientos de penalti, córners, expulsiones, etc.).
4. Visibilidad
Existen campos, como el Sapporo Dome japonés, que son sede tanto de un equipo de futbol (hierba natural) como de otro de béisbol (césped artificial). ¿Cómo lo hacen? Disponiendo de sistemas que permiten cambiar la estructura completa del estadio (césped, dimensiones, gradas, etc.) dependiendo del deporte que se vaya a practicar.
5. Accesibilidad
En un Mundial de fútbol se producen grandes aglomeraciones de público en las cercanías de los estadios. Pues bien, gracias a la inteligencia artificial y a tecnologías de detección biométrica, los espectadores pueden llegar al estadio de una manera rápida, ordenada y segura. Incluso se puede acceder más fácilmente a parkings, restaurantes, localidades, etc. Estas tecnologías también permiten eliminar barreras arquitectónicas que dificultan la movilidad de personas con discapacidad motora.
6. Adaptabilidad
Ver gradas vacías en un partido de un Mundial de fútbol es muy desagradable. Para evitar estas imágenes ya hay estadios, como el Nacional de Singapur, donde, dependiendo del número de localidades vendidas, se pueden retirar o colocar asientos automáticamente.
7. Estructuras desmontables
El Mundial 2030 se jugará en estadios ya construidos… pero también en otros de nueva creación. Para que estos últimos no sean abandonados tras la gran cita futbolística, como ha ocurrido en otras ocasiones, es necesaria la construcción de estadios que puedan ser desmontadosempaquetados y reconstruidos en cualquier otro lugar. Un ejemplo es el Ras Abu Aboud, una de las sedes del Mundial de Qatar 2022, cuyo tejado, paredes y campo son desmontables.
8. Visibilidad
En el Mundial 2030 se exigirá que la visibilidad sea óptima desde cualquier asientocosa que no ocurre en muchos de los campos de fútbol actuales. Un ejemplo para seguir es el Scotiabank Saddledome (Calgary) cuyo diseño de paraboloide lo ha convertido en uno de los mejores estadios para ver cualquier evento deportivo.
9. Confortabilidad
Los espectadores que pagan elevadas sumas de dinero para ver un encuentro de un Mundial de fútbol no solo se conforman con ver un buen partido, también quieren estar cómodos. El estadio catarí Khalifa dispone de un moderno sistema de aire acondicionado que permite al público soportar temperaturas superiores a los 50 ºC ahorrando mucha energía.
La tecnología lo es todo
Estimados lectores de Muy Interesante: en el mundo del fútbol el progreso científico influye en la evolución de los balones, en los sistemas de juego, etc. También en la ropa, la alimentación o salud de los futbolistas. Sin embargo, no hay que olvidar que, sin los modernos avances tecnológicos, los estadios que protagonizarán el Mundial 2030 serían imposibles de disfrutar.