Las autoridades mexicanas encontraron este viernes (5) los cuerpos desmembrados de siete personas que presuntamente habían sido ejecutadas bajo cargos de pertenencia a grupos criminales, informó la fiscalía del estado de Puebla, en el centro del país, donde se produjo el hallazgo.
Cinco de las víctimas fueron decapitadas, dijo a la prensa el fiscal estatal Gilberto Higuera, detallando que los cuerpos se encontraban dentro de un automóvil abandonado en una transitada vía de las afueras de la ciudad de Puebla, capital regional.
En cada uno de los cadáveres “encontramos un mensaje escrito en papel […] refiriéndose al motivo de la privación de la vida, que evidentemente fue injustificada, ilícita, delictiva”, dijo Higuera.
Respecto a estas multas, el fiscal explicó que los cargos “van desde tráfico de drogas en pequeña escala, hurto en transporte y extorsión”.
Puebla, uno de los principales destinos turísticos de México por su rica cultura, gastronomía y arquitectura colonial, no escapa sin embargo a la violencia del crimen organizado que azota varias regiones del país.
Algunas localidades han sido escenario de asesinatos durante enfrentamientos entre narcotraficantes, y también se denuncian con frecuencia casos de extorsión.
La violencia vinculada a los cárteles ha dejado alrededor de 450.000 muertos y más de 100.000 desaparecidos desde 2006, cuando el gobierno declaró la guerra al narcotráfico con participación militar.
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