Salud
PorAmbar Román
Un reciente estudio llevado a cabo por la Universidad de Sídney revela una creciente crisis de salud mental entre los adultos jóvenes nacidos en la década de 1990, comúnmente conocidos como los “bebés de los 90”.
Este grupo, a medida que se acerca a la mediana edad, muestra un preocupante deterioro en su bienestar psicológicoun fenómeno que contrasta con las generaciones anteriores y sus mejoras continuas con el tiempo. Los resultados plantean inquietudes significativas sobre la salud mental de los millennials, que, a diferencia de sus predecesores, no experimentan una curva ascendente en su bienestar mental.
El estudio abarcó a casi 30,000 adultos entre 2001 y 2020 pone de manifiesto que el declive es más pronunciado en aquellos nacidos en la década de 1990sugiriendo que esta generación desempeña un papel crucial en la tendencia general de deterioro de la salud mental. Richard Morris, el autor principal del estudio, advierte que es necesario cambiar el enfoque exclusivo en la salud mental de niños y adolescentes, ya que la crisis se extiende más allá de esas etapas de la vida y requiere una atención más amplia y sostenida.
Los Estados Unidos enfrentan desafíos similares en términos de salud mental. Según un informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), casi 1 de cada 5 adultos en EE. UU. ha sido diagnosticado con depresión en algún momento de sus vidas, siendo más prevalente entre aquellos de 18 a 24 años.
Las tasas de depresión a lo largo de la vida en los Estados Unidos han aumentado del 19,6% en 2015 al 29% este año, según una encuesta de Gallup. Esto resalta la urgencia de abordar la salud mental de los adultos jóvenes, ya que el deterioro parece persistir a medida que envejecen.
Causas del declive de la salud mental de los millenials
La respuesta sigue siendo esquiva, según el psiquiatra e investigador Nick Glozier de la Universidad de Sídney. Sin embargo, diversas posibilidades están siendo consideradas, como el cierre de escuelas relacionado con la pandemia, pérdida de empleos e ingresos, y el auge del trabajo remoto.
Además, otros estudios sugieren que factores como el crecimiento de las redes sociales, la disminución de la actividad física, los hábitos de sueño deficientes y el cambio climático podrían contribuir a este fenómeno. Los investigadores enfatizan la importancia de comprender el contexto y los cambios sociales que afectan de manera diferente a los jóvenes para abordar eficazmente esta tendencia preocupante.
La organización Kaiser Family Foundation (KFF) también señala que aproximadamente el 50% de las personas de 18 a 24 años informaron haber experimentado ansiedad o síntomas depresivos este año, en comparación con aproximadamente un tercio de los adultos en general.
“Comprender el contexto y los cambios en la sociedad que han afectado de manera diferente a los jóvenes puede contribuir a los esfuerzos para mejorar esta tendencia y evitar que continúe en las cohortes emergentes”, concluyen los autores del estudio de la Universidad de Sídney.
Con esto, los expertos en salud mental instan a una acción más decidida para abordar los factores subyacentes que contribuyen al declive de la salud mental en los millennials y trabajar hacia soluciones efectivas que reviertan esta preocupante tendencia. La sociedad en su conjunto se enfrenta a un desafío urgente de cuidar la salud mental de la generación que está a punto de ingresar a la mediana edad.
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