Salud Los ventiladores de cuello están de moda. Son ligeros y económicos, pero pueden tener desventajas en algunos casos.
El ventilador es un clásico del verano que lleva décadas ayudándonos a aguantar como podemos las cada vez más frecuentes olas de calor. Es además una alternativa más barata y con menos gasto de electricidad que el aire acondicionado.
Tipos de ventiladores hay muchos, algunos pequeños e individuales. Dentro de esta línea, un nuevo modelo se ha convertido en la gran moda de este verano: el ventilador de cuello.
Qué ventajas tiene el ventilador de cuello
Las dos mejores bazas del ventilador de cuello es que son ligeros y baratos. Como en todo, hay calidades y el precio varía según el modelo. Puedes conseguir uno por unos diez euros. Otros modelos más sofisticados rondan hasta los 50 euros.
La corriente de aire frío de estos ventiladores puede aumentar el riesgo de otitis y conjuntivitis
Otro de los atractivos que les ha dado fama es el diseño de los más sofisticados. Dan un aire moderno y cool. Nada que ver con esos miniventiladores en forma de linterna que tenemos que mantener todo el tiempo frente a la cara, como si fuera un micrófono. Los ventiladores de cuello parecen más unos auriculares modernos.
El aire que expulsan es muy agradable. Es una pequeña brisa (se puede regular) constante y dispersa, ya que consta no de uno, sino de dos pequeños ventiladores dentro de la carcasa. Según el modelo, hay varias aperturas para que el aire circule por todo el contorno de la cabeza.
Por último, es fácil de cargar. Tiene una entrada USB que te permite recargarlo en el ordenador o con un enchufe acoplado a un transformador. Eso sí, necesitas unas cuantas horas para que se cargue completamente.
¿Suponen un riesgo para la salud muscular?
Las corrientes de aire son buenas para renovar el aire de una habitación. Respecto a las corrientes que nos dan directamente en la cara o que nos obligan a llevar un pesoaunque sea poco (unos 200 o 250 gramos), podríamos poner reparos.
“Nada es blanco ni negro, hay matices”, nos confirma el doctor Martín Almendros. “El hecho de que no pese es bueno. Pero hay personas, sobre todo las que tienen ya de base una tensión de la musculaturay en especial los músculos de la base del cráneo, a las que los 250 gramos del aparato pueden suponer la gota que colma el vaso”.
Ese peso podría suponer una contractura adicional y que empecemos a sufrir un dolor. El ventilador en lugar de aliviarnos nos va a fastidiar los días de vacaciones estivales.
Otras personas, que no dejan de ser casos minoritarios, son aquellas que “no por el peso del aparato, si no por sensibilidadgenerar se contracturas y dolor de cuello, cefaleas e incluso mareos”, añade el doctor.
Por silenciosos que sean, hay personas que les puede molestar tener un ruido de vibración constante al lado del oído. Estos aparatos, sobre todo los más baratos, tiene los ventiladores muy a la altura de la orejay puede molestar.
¿Puede afectarnos la corriente de aire?
Respecto al flujo constante de aire hacia la zona de la parte baja de la cara y el cuelloel doctor también se muestra ambivalente. No a todo el mundo le afectará de la misma manera.
“En personas que suelen tener problemas con las vías respiratorias altas, esas personas que con una corriente se resfrían, estos ventiladores pueden hacer que tengan un aumento de infecciones”, dice. La explicación es que las corrientes hagan que se estrechen los vasos sanguíneos y disminuya la llegada de sangre a estas áreas, ya debilitadas.
También hay más riesgo de otitis en los oídos. Especialmente si se los ventiladores se utilizan justo después de salir de bañarnos. “Hay restos de agua y humedad en la mucosa del conducto auditivo externo y esta bajada de temperatura hace que los patógenos proliferen con mayor facilidad”, nos explica el doctor Martín Almendros.
Este tipo de infecciones se pueden producir también en los ojos. Las conjuntivitis son otro clásico de los problemas de verano. Estos ventiladores son un factor que predispone a que produzcan con más facilidad.
En resumen, sí a estos ventiladores de cuello siempre que mantengamos las debidas precauciones.
