EL SISTEMA ELECTORAL ALEMÁN: LA CONFIANZA EN LAS INSTITUCIONES.

EL SISTEMA ELECTORAL ALEMÁN: LA CONFIANZA EN LAS INSTITUCIONES.

Hablar de democracia es hablar de un sistema electoral y de partidos que funcionan con reglas claras y definidas para los ciudadanos. En Alemania el sistema electoral  puede parecer muy complejo, incluso para los alemanes. Su funcionamiento permite alcanzar la mayoría de gobierno, así como también la mayoría en el parlamento. El pais se divide en 299 circunscripciones uninominales y 16 circunscripciones plurinominales que corresponden a los Estados Federados (Länder). Sus respectivos parlamentos se eligen a traves de lo que se denomina “representación proporcional personalizada”.

El politólogo alemán Dieter Nohlen, indica que dentro del  sistema  proporcional  se  permite  un  voto uninominal. Por ello, cada elector dispone de dos votos, el primero (Erststimme) para la elección directa de un diputado en las circunscripciones uninominales por mayoría relativa, el segundo (Zweitstimme) para votar por una lista cerrada y bloqueada de partido a escala de los Estados (Länder). Este segundo voto es el que va a determinar cuántos diputados habrá en el Parlamento (Bundestag). Hay que mecionar que los partidos están sometidos a la barrera electoral, es decir, para permanecer en el parlamento necesitan contar con el minimo de 5%. Aunque parece complejo, el sistema electoral permite al elector usar su voto de forma útil.  Esto quiere decir que los ciudadanos expresan su preferencia por cierto candidato, y con el segundo voto indican que partido debe tener mayoría en el parlamento. Así, los alemanes están seguros de que la mayoría será la que gobierne a decisión propia de los ciudadanos y no a decisión de los partidos políticos. Para que todo esto funcione, la maquinaria electoral recae en el estado como responsable de la preparación y organización de las elecciones. Esto se debe a la gran confianza que los alemanes tienen en las instituciones ordinarias.

En Alemania se cuenta con una Ley Electoral Federal (Bundeswahlgesetz), la cual enumera los organismos electorales como el Director Federal de las Elecciones (Bundeswahlleiter)  y  Directores  Federales  de Elecciones   para   el   territorio   electoral, (Landeswahlleiter), Directores electorales de distrito (Kreiswahlleiter)  y  presidentes  de  las  mesas electorales  (Wahlvorsteher)  y  por  lo  menos  un presidente electoral y un comité electoral para cada distrito  electoral  con  la  tarea  de  determinar el resultado de los votos por correo. La formación de los organismos electorales se da con el Director Electoral Federal y su adjunto, los cuales son nombrados por el Ministerio Federal del Interior para la construcción y los asuntos Internos. Los directores electorales de los Estados (Länder), los directores electorales de los distritos y los presidentes de las elecciones, así como sus adjuntos, serán nombrados por el gobierno de los estados (Länder) o el organismo designado por este. El sistema de resolución de las impugnaciones, recae en la Comisión Electoral Federal (Bundeswahlausschuss) compuesta por el Director Electoral Federal como presidente (Bundeswahlleiter ) y por ocho personas con derecho a voto nombradas por él como asesores y dos  jueces  del  Tribunal  Administrativo  Federal. Aunque parece una lista muy grande, el carácter público garantiza la regularidad de las elecciones manteniendo la confianza de los alemanes en el correcto desarrollo de las elecciones. Cabe decir que la federación  reembolsará  a  los  Länder  por  sus municipios (asociaciones de municipios) los gastos necesarios ocasionados por la elección. Junto con la estructura electoral, el sistema de partidos tiene un gran impacto en la democracia del país.

En Alemania los partidos políticos cuentan con cuatro vías de financiación: las cuotas que pagan los afiliados, las aportaciones del estado, las donaciones y las contribuciones especiales, es decir, un impuesto que pagan los cargos electos del partido por ejemplo los ministros. De estas cuatro formas las donaciones son las que ayudan más a los partidos. La ley de partidos obliga a que se comunique de forma inmediata al Bundestag todas las donaciones que superen los 50,000 euros, lo que se hace para mantener la transparencia, legalidad de acciones y evitar  caer  en  prácticas  de  lobby  que  ejerzan influencia  desproporcionada  en  los  programas políticos. Además, con lo anterior se evita a los políticos  o  los  partidos  crear  un  método  de recompensa con favores a los votantes o bien a los donantes.

Como se dijo anteriormente, el estado contribuye con 83 centavos de euro  por cada voto que reciben los partidos en las elecciones.  En el caso alemán, la financiación estatal está apoyada sobre la llamada base social del partido, es decir, se hace un cálculo a partir de los votos que obtuvo el partido en las últimas elecciones europeas, federales y autonómicas, así como también de las aportaciones y donaciones que recibe  de  sus  militantes.  Los  partidos  políticos alemanes cuentan con un límite general que es determinado  cada  año  por  el  presidente  del Bundestag. Como vemos tanto el sistema electoral como el de partidos, generan una amplia confianza entre los alemanes por su transparencia y claridad.